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jueves, 10 de enero de 2019

Arcade Candy, Sega Blast City inicio de restauración parte-1.

Ya la tengo aquí!!



Casi 1´85 metros de alto...



Fuente de alimentación


Como ya tendremos tiempo de ver la máquina en sí misma, vamos a trabajar por partes, que es la única manera de hacer las cosas bien. Primero algo fácil y importante: fuente de alimentación y amplificador de audio.




Al estar al nivel del suelo la cantidad de porquería que tendrá acumulada será importante y eso fácilmente te puede crear un corto y romper la máquina. O incluso peor: la  peta y se incendia. Esto es algo que no se puede dejar pasar en ninguna de estas máquinas.




Voy a cruzar los dedos y ver como está todo: quemados por demasiado uso, plásticos agrietados en conectores, componentes con mala pinta...




La foto no es mía, pero sirve para ver como es el diseño, cuatro tornillos y sale. Realmente la calidad percibida es enorme. Esto básicamente es: si se rompe, desconectas dos cables y quitar y poner otra.






Como es comprensible, veinte años trabajando a lo bestia, abriéndose, reparándose... pues nuevas no van a estar, por mucho que a primera vista el blanco disimula mucho.



Odio profundamente tener cosas desmontadas, y no me importa las horas que tenga que estar con ella para acabarlas. Lo haré rápido.




No tiene mucha historia desmontarla. Pero hay que ir con muchísimo cuidado. Cable muy grueso, todo de mucha calidad, 


Lo esperado: kilos de mierda (literalmente).



Separamos los dos laterales.






 


Porquería a paladas  en la placa que distribuye los voltajes.


No es quemado, es una pegote de mierda.

Esto es la placa amplificadora de audio, a la derecha la placa de alimentación.


       



     

 

El ventilador: todas las aspas y la parte central son metálicas.




Después de desmontar todo y limpiar a fondo con sumo cuidado, éste es el resultado.













    


Acabada.